lunes, diciembre 29, 2008

Palestina

Foto: I.N., Árbol en Bruselas, 2008
He desayunado viendo las noticias del ataque salvaje de las tropas israelíes a Gaza. Viendo cómo no dejan pasar la ayuda humanitaria y los cadáveres se hacinan y los enfermos se agravan y mueren porque no hay sangre ni medicamentos y las autoridades israelíes violan la convención de Ginebra. Y la Unión Europea sólo condena formalmente sin tomar ninguna medida, y Obama calla, porque la financiación de su campaña viene justamente de los que sostienen al gobierno agresor.
Conste que yo admiro la cultura judía y soy consciente de la historia y de lo que fue la Shoah, y echo de menos el espíritu de los pioneros socialistas que querían fundar un estado abierto, conviviendo pacíficamente con los palestinos. Tengo muchos amigos y conocidos judíos, que no creen en esta política de violencia. Creo que han engañado a la gente con la misma patraña de la seguridad con la que nos burlan a todos, y han convertido el mundo en un lugar sangriento, violento, desesperado, imprevisible. ¿De qué sirve esta provocación? Sólo parece beneficiar a los fabricantes de armas y a esos políticos que quieren hacernos a todos rehenes de su política supuestamente antiterrorista, practicando ellos terrorismo de estado, como dijo Harold Pinter de Tony Blair. Sirve para romper las vías pacíficas y el entendimiento, para frenar el avance de las mujeres en la cultura musulmana, para hacer que la religión sea la base para la política, para heroicizar a los mártires suicidas, sirve para que no haya sociedades libres ni democráticas.
He ido a la manifestación de esta tarde en Travessera de Gràcia, a vociferar y llamar asesinos a los políticos israelíes ante la delegación comercial de Israel. Al principio casi todo el mundo era árabe, luego han ido llegando los progres de siempre. Naturalmente, no he secundado la consigna, gritada por alguien, que vitoreaba a Hamás. Para mí, Hamás y el terrorismo suicida es sólo el reverso de la misma moneda. Aunque sé que gracias a este ataque a Gaza surgirán muchos terroristas suicidas voluntarios en todo el mundo musulmán. En cierto momento le he preguntado a un chico árabe qué significaba la frase en árabe que él mismo había gritado. Me ha dicho tentativamente que "estamos con Gaza hasta con la sangre" y señalándose al estómago ha dicho "y con toda la persona". "¿Quiere decir con las entrañas?", le he preguntado yo. "¡Sí!" ha contestado con una sonrisa. Me gustaba que en esta manifestación hubiera bastantes mujeres árabes, con la cara descubierta. Casi me parecía escuchar el canto del muecín, aun con los ecos de la escritura del desierto de Isabelle Eberhardt.
Es una vergüenza la doble moral, que permite a Israel hacer lo que no se tolera en los otros. Que violen la convención de Ginebra, como la violaba Bush con Guantánamo. Y necesitaba poder decirlo, aunque fuéramos pocos.

domingo, diciembre 28, 2008

En La Vanguardia

Me alegro de haber contribuido a que saliera este artículo. Un día de estos saldrá algo en El País. Ojalá estas gestiones y las hechas por vía diplomática, además de la campaña de Acción Urgente de Amnistía Internacional ayuden a liberarle.
Irán se queda sin noticias de Hoder, líder bloguero La desaparición de Hoder coincide con el cierre del centro pro derechos humanos de Ebadi Ahmadineyad aumenta la presión sobre los críticos XAVIER MAS DE XAXÀS Barcelona Hasta pocos días antes de su misteriosa desaparición en Teherán, Husein Derajshan, alias Hoder, era el típico bloguero convencido de que internet abría un espacio para el activismo social y político. En la blogosfera iraní no había nadie más popular. Sus comentarios, leídos por más de 20.000 personas cada día, eran duros con el Gobierno de Mahmud Ahmadineyad. A su alrededor crecía una comunidad partidaria de un Irán laico, democrático, igualitario y sin enemigos, ni siquiera Israel. Derajshan tiene 33 años y la agencia Fahan News, vinculada a los servicios de inteligencia, afirmó el 17 de noviembre que había sido detenido y acusado de espiar para Israel, lo que equivale a la pena de muerte. Ese mismo día, Irna, la agencia oficial, distribuyó una entrevista con Husein D, un supuesto periodista reformista que renegaba de su pasado y atacaba a sus compañeros. La desaparición de Derajshan coincide con el cierre, el pasado domingo en Teherán, del centro pro derechos humanos de Shirin Ebadi, premio Nobel de la Paz en el 2003. La UE ha exigido su reapertura y ella ha prometido seguir dando batalla. Pesea que la libertad de expresión está más asentada en Irán que en otros países islámicos, la restricción de los derecho civiles va en aumento. Decenas de profesores universitarios han sido expulsados y a los alumnos se les intimida. Aun así, el pasado día 12 varios estudiantes quemaron retratos de Ahmadineyad, coincidiendo con su visita a laUniversidad Amir Kabir. Este clima de persecución es el mismo que hace ocho años convenció a Derajshan de irse a Toronto. El régimen había cerrado casi todos los medios reformistas y desde Canadá esperaba mantener vivo su espíritu. En noviembre del 2001 arrancó el blog Hoder.com, donde incluyó instrucciones en farsi para la creación de blogs, que fueron seguidas por decenas de miles de iraníes. A sus lectores los animaba a lograr el cambio social y político. Creía que estaba al alcance y ponía el ejemplo de la revolución sexual que vivía el país. “La virginidad pierde importancia”, manifestó en una nota. “El sexo antes del matrimonio es muy común. Los padres lo toleran”. Hasta los homosexuales pueden conseguir pareja en Teherán en pocos minutos si saben dónde buscar. En enero del 2006 Derajshan visitó Israel con su pasaporte canadiense, pues este es un viaje prohibido a los iraníes. Su intención era establecer un puente entre los dos países. Paseó por las calles de Tel Aviv con una camiseta azul y el lema “I love Tehran” y dio entrevistas proponiendo encuentros entre las sociedades de ambas naciones. Para entonces la policía filtraba parte de sus aportaciones a sitios como Facebook, Flickr, Twitter y YouTube. Aunque los blogs son muy populares en Irán (hay más de 800.000), las autoridades censuran los contenidos que vienen de fuera. El acceso a más de cinco millones de webs está bloqueado. La fiscalía general opina que internet “inflige un daño social, político, económico y moral que es preocupante”. Esta opinión no impide, sin embargo, que haya 21 millones de internautas. Derajshan explotaba estas contradicciones para explicar su punto de vista, lleno de grises. Retratos como el de Marjane Satrapi en el cómic Persépolis no le parecían adecuados. Creía que reforzaban la idea simplista de un Estado odiado (Irán) frente a otro de gente fantástica (EE.UU.).
Por otra parte, las navidades son negras, la ofensiva brutal del gobierno Israel contra Gaza sólo puede llevar a una guerra ciega y de consecuencias imprevisibles. Afganistán es otro lugar donde se demuestran las consecuencias del mal hacer de Occidente. Hace años que vivimos así, con la impotencia de ver que se hace todo lo equivocado y todos tenemos que pagar las consecuencias de un mundo oscuro, violento y sufriente. Nuestro gobierno contribuye, vendiendo armas por doquier y repartiendo sus tropas por lugares donde no son bienvenidas. En Afganistán, en lugar de haber apoyado movimientos democratizadores y ayudar a las mujeres, pusieron un rey corrupto (que sólo cuida sus magníficos ropajes), dejaron que las mujeres siguieran sojuzgadas y que el opio y los señores de la guerra siguieran mandando. Eso sí, llenando el país de tropas. El dinero que gastamos en esos soldados que se arriesgan allí inútilmente podría haber servido para construir algo, un país más justo y avanzado. Con la misma impotencia con que vemos cortar los árboles en nuestro país, acelerando su desertización, y vemos cómo se abandona la educación, creando más y más semianalfabetos sin futuro, cómo se prima la mercantilización, no se contienen los precios, se desmantela la universidad como lugar de conocimiento y saber, se ayuda a las instituciones financieras que siguen repartiendo beneficios, se plantea la flexibilización del mercado laboral (cuando habría que luchar con uñas y dientes por mantener el Estado del bienestar, como me decía ayer un economista), con esa misma impotencia hemos visto como una política falsamente antirretorista y amparada en un falso pretexto de seguridad, convertían el mundo en un lugar cada vez más inseguro y terrible, donde todos somos tratados como sospechosos y humillados y vigilados sin escrúpulos en nuestros desplazamientos y comunicaciones mientras que se permite el tráfico de plutonio en los aviones, de armas en los mismos aviones (resulta irónico que no podamos llevar cortauñas y que nos hagan quitarnos los zapatos mientras que otros llevan a diario armamento pesado a África, por ejemplo, sin problema, o plutonio a Londres, y atraviesen esos aeropuertos tan vigilados), y donde todos podemos cada vez más saltar por los aires por el odio que creamos con esa violencia de Estado. Ese ataque del gobierno israelí contra Gaza nos afecta a todos, y generará cientos de terroristas suicidas en el mundo musulmán. Ahmadineyad tampoco es ninguna caualidad. Así son las cosas.

sábado, diciembre 13, 2008

Un clima crítico

Foto: I.N., Lledoners de Joaquim Folguera, 2008
He enviado el artículo de Patricia Gabancho "El urbanismo feo" a alguien, que me ha dicho: "Sí, está bien que hable del tema, pero podría ser más crítica y el tema de la falta de verde en la ciudad ni lo menta". En cambio a mí me ha parecido no sólo interesante, sino muy esperanzador que todo esto empiece a decirse en la prensa, que Victoria Combalía califique la plaza Lesseps de "falsa vanguardia", que Francesc Arroyo hable de nuestro manifiesto en El País y al día siguiente reaccionen los partidos políticos. Creo que es esperanzador que se cree un ambiente de debate crítico, que los políticos municipales vean que no vamos a tragar con todo, que pueden perder sus votantes, que no pueden arrebatarnos la frondosidad a su capricho una y otra vez.
Decía Patricia Gabancho sobre Lesseps: "Pero miremos la plaza desde la perspectiva humana: es un vasto espacio paradójicamente lleno de ruido visual. Entregarle la ornamentación al señor Viaplana, a la vista de lo mal que ha envejecido la plaza de los Països Catalans, delante de la estación de Sants, era un riesgo cantado. Vigas adustas y miradores extraños constituyen la parte que se supone blanda de este espacio excesivo, despojado de sombras y de efectos amables. Un espacio, además, escasamente verde (excepto un rincón futuro), cuando la antigua plaza, impracticable como era, albergaba un bosquecito excepcional. ¿Era imposible salvarlo?"
Tal vez hemos perdido la batalla de nuestros almeces de la plaza Joaquim Folguera, enero está aquí mismo y la sola idea de ver cómo los cortan me remueve las entrañas. No sé qué podemos hacer para evitarlo. Y tampoco me consuela esa esperanza de algunos de que dejen metros de tierra en la pobre plaza para replantar algo. En este país, los arquitectos no tienen ninguna sensibilidad verde y los paisajistas no reciben el trato al que están acostumbrados en Inglaterra o Alemania o Francia, donde trabajan en pie de igualdad con los arquitectos. Aquí son humillados una y cien veces por éstos, que son arrogantes como el autor de Lesseps, y se creen efectivamente por encima del bien y del mal. No creo las promesas de los políticos (arboricidas). También engañaron a los vecinos de Lesseps con este espantoso proyecto. Además, me parece gravemente antisostenible pensar en los árboles como un mobiliario de quita y pon, desdeñando los años que han tardado en crecer ni las reducidas posibilidades de que crezcan. Y menos sin tierra, con tierra compactada, sin espacio en los alcorques, con sequía y contaminación.
Ayer, al atravesar la plaza Joaquim Folguera, vi el círculo de almeces como el cerro de los faunos del cuento, como aquellos claros del bosque donde según la tradición mítica nórdica se producían los encuentros de hadas y ninfas, donde se reunían los duendes de los libros que yo leía de pequeña, un lugar mágico y secreto, protector de los malos espíritus del cemento y el ruido. A veces pienso que mucha gente, al meterse en sus coches se convierte en una especie de robot maligno, incapaz de pararse o de avisar para evitar que matasen al perro heroico y triste del otro día, y son capaces de lo que sea con tal de llegar antes a su estúpido destino. De sus rugidos de leones contaminantes y del peor estruendo y suciedad de las obras que enriquecen a los corruptos nos protegían esos árboles amables que recordaban al poeta de la plaza. Ahora el espíritu de Joaquim Folguera tendrá que emigrar y nosotros, ciudadanos envilecidos, atravesaremos otra cantera de cemento, polvo y ruido, con un pañuelo en la nariz y el corazón encogido ante la nueva fealdad de Barcelona. [me temo que se me ha colado un trozo que corresponde al otro blog]

jueves, diciembre 11, 2008

Una Carta en El Periódico

Foto: I.N., Balcones en Barcelona, 2008
Enfermedades mentales graves, según "La Marató".
La Marató de TV-3 trata este año de las "enfermedades mentales graves" y pone al mismo nivel varios trastornos: esquizofrenia, depresión, ansiedad, déficit de atención e hiperactividad, autismo y trastorno obsesivo compulsivo. ¿Hasta qué punto se puede considerar que la ansiedad es una enfermedad mental grave? ¿Y la depresión? Muchas personas con esos diagnósticos no sufren una distorsión grave de larealidad; de hecho, no tienen pérdida del sentido de la realidad. Pero en la esquizofrenia sí se da esta pérdida. ¿Es legítimo ponerlos a todos en el mismo saco? Por otra parte, en La Marató se habla de potenciar la investigación en el campo de la biomedicina, pero no se hace alusión alguna a los aspectos psicológicos y sociales, muy relevantes en el desencadenamiento y evolución de los llamados trastornos mentales. Los profesionales que trabajamos en salud mental oímos cada día las quejas de muchas personas que nos hablan de sus dificultades para encontrar su lugar en la vida, establecer vínculos sociales, tener pareja, tener un empleo que les permita realizarse, enfrentarse al sentimiento de soledad; en definitiva, para poder trabajar y amar.¿Cómo es que en la difusión de La Marató no se hacen referencias al sufrimiento de las personas? ¿Por qué no se menciona la atención psicoterapéutica ni la potenciación de los recursos psicológicos de los pacientes? El ser humano, su mente, no puede explicarse solo en términos de circuitos cerebrales, y los problemas mentales tampoco pueden explicarse únicamente como el resultado de una disfunción de algún neurotransmisor cerebral. La mente humana es mucho más compleja.
Lluís Farré, Josep Moya. Barcelona

domingo, diciembre 07, 2008

El fin de la Universidad

Université Paris II
En la prensa se ha empezado a hablar al fin de la miseria de la Universidad y aunque los diarios siguen la política gubernamental y argumentan que los estudiantes están confundidos y que el llamado proceso de Bolonia sólo les ayudará y les dará movilidad, algunas mentes preclaras han señalado esas miserias y cómo ese proceso de Bolonia sirve de pretexto para reformas que contribuyen a mercantilizar la Universidad, a aniquilarla como lugar de conocimiento, a acabar con las humanidades y a afianzar aún más la mediocridad que reina en los puestos decisivos, mientras los profesores más brillantes se han quedado en reductos y no deciden, mientras que esas figuras mediocres cortan el paso a toda innovación. Lean si no el artículo de Manuel Cruz en El País, o el de Jordi Llovet en el Quadern de ese mismo medio. La excelencia ya no sirve para acceder ni medrar en las Universidades de este país, sino todo lo contrario. Y cada vez será más difícil que los estudiantes alternen trabajo y estudios, o que elijan asignaturas que no interesen al mercado, o que la Universidad financie proyectos que no interesen directamente a laboratorios y corporaciones.
Todo esto es aún más grave en un país de gente cada vez más ignorante y mediocre. Por eso, los estudiantes encerrados y en huelga tienen toda la razón.